jueves, 31 de mayo de 2012

PINTANDO COMO ARCIMBOLDO

Casi todos los pintores de cámara de las distintas cortes de reyes y emperadores han “idealizado” en sus retratos a los príncipes y monarcas para los que trabajaban, creando pinturas en las que aparecían como los mismos dioses del Olimpo con una belleza y esplendor por encima del resto de sus súbditos.
 Pero no todos los pintores lo han hecho así. 
José Arcimboldo fue uno de los pintores más originales y extravagantes del alto renacimiento. Trabajó para tres de los emperadores más poderosos de Europa durante el siglo XVI: La dinastía de los Habsburgo, creando unas obras completamente originales y llegando a retratar a su propio mecenas: El Sacro Emperador Romano-Germánico Rodolfo II con nariz de pera, ojos de habas y cuello de calabazas.    Este es el retrato del emperador Rodolfo II creado por Arcimboldo hacia 1591.  
Rodolfo II como Vertumnus por
 Giuseppe Arcimboldo (1591)


Rodolfo II por Joseph Heintz (1593)
Este es un retrato "más convencional" del mismo emperador Rodolfo II pintado por otro pintor de la corte de Bohemia: Joseph Heintzen 1593.
Arcimboldo trabajó para tres emperadores de la dinastía de los Habsburgo: Fernando I, su hijo Maximiliano II y su nieto Rodolfo II.   
Fernando I invitó a Arcimboldo a su corte de Viena en 1562, y el pintor permaneció con los emperadores durante 26 años. Los tres emperadores valoraron muchísimo a su pintor e inventor de la corte y le tuvieron en gran estima, llegando incluso a ser nombrado Conde Palatino.
 Estos emperadores de la dinastía Habsburgo tendrían que ser mucho más conocidos en España: Fernando I, el emperador que invitó a su corte a Arcimboldo había nacido en Alcalá de Henares y estuvo a punto de ser rey de España; era el nieto favorito del Rey Fernando (el Católico), de hecho se llamaba así en honor de su abuelo.
En esta pintura de Arcimboldo de 1553-54 podemos ver al hijo de Fernando I, el emperador Maximiliano II, junto con su mujer Maria de Austria y tres de sus hijos.
Maximiliano II había nacido en Viena pero se educó en Madrid y Valladolid con sus primos Felipe II y Maria, de la que se enamoró y con la que se casaría y tendría 15 hijos.   La pareja del cuadro (Maximiliano II y Maria de España, hermana de Felipe II) fueron también Reyes de España durante los 3 años que Felipe II se dedicó a viajar por Europa, en los que ellos reinaron como regentes. Fue un matrimonio muy feliz.
Su hija mayor que aparece en el cuadro con la mano de su madre María acariciando su pelo, se llamaba: Ana de Austria, se casó con su tío Felipe II y fue reina de España y madre de Felipe III. Como sabemos tanta endogamia no acabó muy bien.
Detrás aparece el segundo hijo varón de los emperadores (el primero había muerto con un año de edad), que más tarde sería el emperador Rodolfo II. 
Este es otro retrato de la hija de Maximiliano, futura reina de España: La archiduquesa Ana de Austria  por Arcimboldo hacia 1563:
 Ana de Austria, hija de Maximiliano y esposa de Felipe II




No disponemos de muchos datos sobre la vida de Giuseppe (José) Arcimboldo. Sabemos que era natural de Milán y había nacido sobre el año 1526 ó 1527 en pleno apogeo del Renacimiento Italiano. Su padre se llamaba Biagio y trabajaba como pintor en las obras de finalización de la catedral gótica de la ciudad.
Tampoco conocemos sus influencias artísticas durante su etapa como aprendiz en Milán, pero puede que llegara a conocer una pieza de cerámica renacentista(mayólica) creada hacia 1536 por Francesco Urbini, que representa una "cara compuesta" por elementos algo mas obscenos que frutas y que podría ser el único antecedente conocido de muchas de sus obras posteriores.

Giuseppe Arcimboldo también trabajó en el diseño de algunas de las magnificas vidrieras de la catedral de Milán, donde descubriría que la vista humana era capaz de integrar desde lejos la luz filtrada por los cristales que forman la vidriera, percibiendo figuras, y rostros humanos que en realidad están formados por muy pocos fragmentos de vidrio de colores.  
Autorretrato 1575, Galería nacional de Praga
En 1549 Arcimboldotenía ya un estudio en Milán como pintor y además de su trabajo en las vidrieras del Duomo se conocen varios diseños de tapices realizados por el artista para la catedral de Como.
Fernando de Habsburgo el futuro emperador del sacro Imperio Romano-Germánico que estaba de paso por la ciudad le encargó la pintura de 5 escudos de armas y probablemente quedó muy complacido con su trabajo artístico y con los conocimientos técnicos del pintor, que abarcaban la mecánica, la óptica (con lentes y espejos), la hidráulica y la arquitectura, como muchos otros genios del renacimiento.

En 1562 con 35 años fue contratado por el emperador Fernando I para su corte de Viena, como organizador de festivales y retratista de la corte, pero el emperador murió en 1564, casi inmediatamente después de la llegada de Arcimboldo a su corte.  Le sucedió como emperador su hijo Maximiliano II que mantuvo a Arcimboldo como pintor de la corte y fue retratado en muchas ocasiones junto a su familia por el artista.  Pero Arcimboldo además de cómo pintor también destacaba en otras muchas facetas, y pronto superó su cometido inicial en la corte de Viena, trabajando como arquitecto, ingeniero, diseñador de máscaras y disfraces y organizador de desfiles, torneos y fiestas para el emperador. Organizó para Maximiliano muchísimos eventos, siendo el propio Arcimboldo quien seleccionaba la bebida y la comida más exótica, incluyendo espectáculos alegóricos fantásticos como un volcán que echaba humo y chispas gracias a fuegos artificiales ó elefantes asiáticos auténticos, con los que quedaban maravillados los invitados del emperador.   
Maximiliano era también un coleccionista de arte, y tenía un gran interés por todo lo esotérico, incluso había solicitado al famoso Nostradamus que elaborara la carta astral de su hijo Rodolfo.  Arcimboldo fue el encargado de comprar obras de arte, relojes, objetos singulares y animales exóticos de todo el mundo, para enriquecer las salas de arte y de maravillas de la colección del emperador, creando así el núcleo de un increíble museo.  
Arcimboldo también organizó grandes desfiles de disfraces en honor de Rodolfo, el hijo y heredero del emperador que entonces era un niño: Podemos ver aquí dos de los diseños originales del pintor para los disfraces de un desfile: Un vestido de “Dragón” y un disfraz de “Cocinero”, compuesto únicamente por cacharros y elementos de la cocina, dibujado hacia 1568.   En este otro diseño de Arcimboldo para otro desfile, vemos a Rodolfo II con seis años de edad vestido como un mini-caballero con una armadura completa, junto a un gigante salvaje representado por Giovanni Bona, y una princesa.



Rodolfo en España con 15 años, pintado por el 
pintor de la corte española Alonso Sánchez Coello
Maximiliano envió a su hijo Rodolfo a España en 1564 cuando tenía 12 años, junto con su hermano Ernesto (los dos niños que aparecen en el cuadro de Arcimboldo que hemos visto antes), para que se preparara como futuro emperador del Sacro Imperio. Su tío Felipe II era el hombre más poderoso de Europa, y no quería que el príncipe se sintiera atraído por el protestantismo y probablemente veía en Rodolfo un posible heredero para el trono de España.
Mientras Felipe II educaba al futuro emperador, en 1568 se incorporó en Viena como nuevo pintor de cámara de Maximiliano II: Martino Rota, tarea a la que cada vez dedicaba menos tiempo Arcimboldo. 

Las cuatro estaciones en el Louvre en París
El día de año nuevo de 1569 Arcimboldo presentó al emperador Maximiliano II una serie completa de las Cuatro Estaciones, retratos compuestos alegóricos de cada época del año, formados totalmente por los frutos y las plantas de cada estación. Parece ser que Maximiliano quedo maravillado con la serie y encargó sucesivas copias al artista para regalar a otros príncipes europeos (algunos de ellos protestantes).   
En 1570, antes de la visita de Maximiliano a la ciudad de Praga (El emperador era también Rey de Bohemia desde 1562), Arcimboldo fue enviado con antelación a esta ciudad que se había incorporado al imperio, para preparar el desfile inaugural que celebraría la llegada de Maximiliano a Praga.

En 1571 Rodolfo volvió a Viena ya con 19 años. Había estado 8 años en la corte de Madrid con su tío Felipe II. En Viena se reencontró con Arcimboldo su amigo de la infancia, al que le manifestó un gran cariño durante toda su vida y le acabaría nombrando Conde Palatino.
Rodolfo fue nombrado Rey de Hungría y de Bohemia por su padre en 1575 y un año después, Maximiliano falleció sin llegar a cumplir los 50 años, después de haber sido emperador durante únicamente 12 años.
Maximiliano había sido un emperador “renacentista” demasiado tolerante, que permitió la expansión del calvinismo durante su reinado y no había logrado ningún éxito importante para detener el avance del Imperio otomano (dirigido por Solimán el Magnífico) que en 1566 había atacado Austria y se quedó a las mismas puertas de Viena.
A su muerte en 1576 fue sucedido en el trono del Sacro Imperio porRodolfo II que tenía 24 años.
Rodolfo II ya emperador en 1577 por Martino Rota
El nuevo emperador Rodolfo II no se sentía muy cómodo en su ciudad natal desde que había regresado de España, y decidió trasladar su propia corte de Viena a Praga: la capital de la Bohemia.   Le llevó 7 años acondicionar el viejo castillo del siglo IX (que hoy es el castillo gótico más grande del mundo) y finalmente trasladó su corte en 1583. Su madre María de Austria,  viuda de Maximiliano, no le quiso acompañar en esta aventura y regresó a Madrid, retirándose con su hija Margarita al Convento de las Descalzas Reales.
Praga era una ciudad muy pequeña, algo más alejada que Viena del peligro de los turcos, que en el apogeo del reinado de Rodolfo tenía únicamente cincuenta mil habitantes. Pero la religión dominante de más del 75% de la población era el calvinismo, y la minoría católica esperaba del nuevo emperador un gobierno católico fuerte.    
La estancia en España bajo la tutela de su tío Felipe II no había convertido en un buen gobernante a Rodolfo II, que fue un emperador introvertido y extravagante cuyos únicos intereses fueron el coleccionismo y la alquimia, mientras descuidaba completamente las cuestiones políticas y la administración de su imperio.  Pero al menos durante su estancia en España había conocido las espléndidas colecciones de arte de Felipe II, y también sus colecciones de reliquias de santos que incluían un clavo de la cruz de Cristo y las lágrimas auténticas de la Virgen María.   
El Jardín de las delicias del Bosco (tabla central)-Museo del Prado
Quedó fascinado con una obra maestra del Bosco: El Jardín de las delicias de 1450 y con el resto de las obras del mismo pintor que coleccionaba Felipe II.   También conoció en la corte de Madrid a Juanelo Turriano, un auténtico ingeniero del Renacimiento (como Leonardo, pero a diferencia de este, Juanelo si que construyó sus máquinas y además funcionaban) que estaba al servicio de Felipe II, y que aunque no era pintor, había creado ingenios hidráulicos y mecánicos, mecanismos de relojería y otros muchos ingenios e  inventos.    

Tycho haciendo alguna
profecía a Rodolfo II.
Rodolfo II convirtió Praga en uno de los principales centros de la cultura en todo el continente europeo y destacó como un gran mecenas de las ciencias y las artes, contratando a los mejores arquitectos, artistas e ingenieros de toda Europa y financiando los estudios de alquimistas, astrólogos y magos. Su matemático imperial y astrólogo fue Tycho Brahe al que le sucedió en 1601 el gran Johannes Kepler que publicaría en Praga su “Astronomía Nova”, obra en la que enunciaba sus tres famosas leyes que permitieron a Newton descubrir la ley de la gravedad.  Pero junto a científicos artistas e ingenieros del más alto nivel, Praga también se llenó de farsantes, charlatanes, magos y alquimistas. Tycho Brahe le profetizó que su destino estaba ligado al de su león, y que moriría asesinado por alguno de sus hijos legítimos, por lo que Rodolfo nunca se atrevió a casarse (aunque tuvo varios hijos con una cortesana).

Rodolfo reunió en Praga la mayor colección de pinturas del mundo y algunos de los cuadros que la componían probablemente fueron seleccionadas por Arcimboldo: Había obras maestras de Leonardo da Vinci como "La dama del armiño" (Aunque esta pintura fue adquirida en 1612 y Arcimboldo no pudo influir en su compra), de Durero, Tiziano, El Bosco, Correggio, Holbein y Veronese. 
El Santo Grial de la última cena
Su obsesión por el coleccionismo le hizo crear en el castillo de Praga el «Gabinete de las Artes y de las Maravillas» una especie de museo donde coleccionaba reliquias y objetos misteriosos a los que Rodolfo atribuía poderes mágicos: Su colección incluía el cuerno de un unicornio (tal vez de un narval) y el auténtico Santo Grial hecho de ágata, también tenía piedras preciosas, la vara de Moisés; barro del valle de Hebrón con el que Dios hizo al hombre, un cuerno de rinoceronte incrustado con rubíes, y dos clavos de Arca de Noé.  
El Gabinete de Rodolfo II no tenía rival en Europa y revelaba la magnificencia y el poder imperial, y era mostrado ceremoniosamentea todos los príncipes, diplomáticos y embajadores que visitaban Praga. 

A Arcimboldo se le ha llamado algunas veces "El Leonardo de Praga", pero en realidad fue más bien el "Juanelo Turriano” de Rodolfo II. Diseñó para el emperador adornos para las fiestas, compró obras de arte para las colecciones imperiales y se encargó de proyectar y construir obras hidráulicas. Siguió pintando cuadros alegóricos compuestos por diversos elementos, combinando la mitología clásica y la alegoría y agregando en sus pinturas los últimos conocimientos científicos. 

Arcimboldo también investigó en música y creó un nuevo método de notación basado en los colores, en el que los tonos oscuros se correspondían con notas graves, y los colores claros representaban notas altas. Parece ser que incluso construyó un “órgano de luces” que al pulsar las teclas combinaba los sonidos con luces de colores y sombras en movimiento, es decir una especie de “multimedia” hace más de 400 años. Gregorio Comanini (autor del primer tratado sobre la música que se ha escrito en Italia) describió en 1590 la invención del pintor Arcimboldo de un artilugio que creaba música en color basada en la luminosidad.

Rodolfo también coleccionaba animales: Aves del paraíso, loros (los llamaban cuervos de las indias), e incluso un "pájaro dodo" (hoy extinguido), tenía 300 de los caballos más bellos del mundo, la mayoría tordos de raza española, coleccionaba tigres, leones, osos, y tenía un cachorro de león que recibió como regalo del sultán de Turquía y que estaba libre por el castillo, y a menudo dormía a su lado como un gato doméstico.  También se dedicó a coleccionar enanos, e intentó reunir un regimiento de gigantes para su ejército.  Arcimboldo no permaneció mucho tiempo en la corte de Praga, después de 4 años solicitó permiso a Rodolfo II para volver a Milán.  

Giuseppe Arcimboldo "Autoritratto cartaceo "
como pergamino 1587- Genova, Palazzo Rosso
EL FIN DE ARCIMBOLDO
En 1587 sintiéndose ya anciano con 60 años (una avanzada edad para la época) se retiró de la corte de Bohemia para regresar a la casa de su familia en Milán, causando una gran tristeza en el emperador Rodolfo II que le consideraba su amigo de la infancia que había organizado para el juegos y desfiles, y con el que probablemente había realizado maravillosos experimentos científicos. Como gratificación por sus servicios a la corte de los Habsburgo, fue premiado con una cuenta con 1.500 florines. 

A pesar de volver a su ciudad natal, Arcimboldo siguió trabajando para la corte de Praga, enviando varios cuadros reversibles y los mejores retratos alegóricos pintados en su madurez como Flora e incluso el propio retrato de Rodolfo como Vertumnus que llegó a Praga en el invierno de 1591.

El retrato alegórico de Flora que podemos ver aquí debajo es, para mi gusto, el cuadro más hermoso de Arcimboldo; se trata de un retrato compuesto únicamente por flores y hojas que representa a la diosa mitológica de los jardines y la primavera, y es sin duda uno de los cuadros más logrados de su madurez como artista.
Flora 1591

El 1 de Mayo de 1592  Rodolfo II concedió a su amigo de la infancia el título de Conde Palatino, con el que garantizaba una buena renta para la vejez del artista.
Pero Arcimboldo murió un año después: el 11 de julio de 1593, tan solo seis años después de su marcha de la corte de Bohemia, y su obra muy pronto cayó en el olvido.
Giuseppe Arcimboldo al igual que El Bosco, fueron artistas muy adelantados a su tiempo, y aunque sus obras alegóricas habían sido admiradas en época por muchos príncipes renacentistas eruditos,  también fueron tomadas muy a menudo por algunos de sus contemporáneos como la obra de una mente trastornada. Ambos fueron artistas muy originales y únicos pero no crearon una escuela de seguidores ni de discípulos.  

De la obra de Arcimboldo no existen antecedentes, pero tampoco seguidores tras la muerte del artista. Durante 400 años ningún pintor volvió a realizar un "retrato compuesto" hasta la llegada de Dalí y el surrealismo en el siglo XX.
En estos dos bodegones de Arcimboldo podemos comprobar la extraña composición y la belleza y el colorido de sus obras de estilo manierista (al arte de esta época del alto renacimiento se conoce como “manierista”), aunque la posición de las frutas y de los vegetales parecen muy forzadas y colocadas con poca naturalidad. Como veremos hasta los bodegones de Arcimboldo resultaban extravagantes y llenos de sorpresas.  


















La fama de Arcimboldo proviene de las “Cabezas Compuestas”, series de retratos formados con frutas, vegetales, flores, pájaros o peces perfectamente pintados, pero que vistos de lejos forman una cara humana relacionada con algún tema concreto. Sus series más famosas son: Las Cuatro Estaciones y Los Cuatro Elementos (con los que estaría compuesta toda la materia, según los alquimistas: Aire, Agua, Fuego y Tierra, el "Quinto Elemento" sería el éter: algo inmaterial parecido al alma o la fuerza vital)
La serie de las cuatro estaciones de 1573: La Primavera, El verano, El Otoño y El Invierno
La serie de los cuatro elementos: Tierra, Fuego, Aire y Agua de 1566.

LAS ESTACIONES

Tuvo tanto éxito con la serie de las Cuatro estaciones, que tuvo que pintar varias copias casi idénticas para su emperador; hay una completa de 1573 en el  Louvre de París y otra serie en Italia en Bérgamo, y en Madrid tenemos la Primavera que es, para mi gusto, la más bonita de toda la serie.
La primavera es un retrato compuesto totalmente con flores y hojas de especies que florecen únicamente durante la primavera y son perfectamente identificables por un botánico. El vestido y los hombros están formados por hojas verdes, mientras que el cuello de la camisa está formada por margaritas. Podemos ver aquí un detalle del cabello (girado) formado por multitud de pequeñas flores silvestres. La piel está compuesta por flores rosas y blancas y la oreja es un tulipán, la nariz esta pintada como un capullo de azucenas, la barbilla y el pómulo son dos rosas y el ojo son flores de belladona.

El resto de las estaciones también están formados exclusivamente por elementos de cada estación: El verano tiene el cuerpo de espigas de trigo y frutas para formar la cara, el otoño está formado por setas, hojas secas y los frutos de la cosecha, y el invierno contiene raíces y ramas sin hojas, mientras que la cara esta formada por corteza de árbol, y el pelo son hojas de hiedra (que son perennes), aparecen también dos frutas de invierno: una naranja y un limón.

LOS ELEMENTOS
Detalle animales del Elemento Tierra 1566
Por petición de la casa imperial, Arcimboldo realizó también otra serie de cuadros sobre los cuatro elementos en los que combinaba peces, animales, llamas y cañones para formar sus retratos compuestos.
Parece ser que algunos elementos y los animales seleccionados para componer estas series podrían representar simbólicamente el poder y la personalidad del emperador Maximiliano.  En esta ampliación podemos ver algunos de los animales que Arcimboldo estudió en el magnifico zoológico de Viena.

Esta serie de los cuatro elementos resulta aún más interesante que la de las cuatro estaciones, porque  Arcimboldo se permite algunas libertades en la elección de los componentes con los que conforma estos retratos. 
Detalle animales marinos del Elemento Agua
Por ejemplo en El Fuego, además de llamas, aparecen brasas y cañones.
Los otros elementos de la serie están formados por muchos de los animales conocidos en el siglo XVI, perfectamente identificables por un zoólogo.
La Tierra se compone con 28 animales terrestres. El aire esta formado únicamente por aves y el agua por animales marinos, peces, crustáceos y mamíferos.
La Serie que mostramos es del año 1566 excepto el Elemento Tierra que data de 1570.  

El elemento Agua esta formado totalmente por 62 especies marinas, aquí podemos ver el detalle de una parte de la cabeza. Todos los animales marinos incluidos por Arcimboldo en este retrato aparecen identificados en este artículo (en italiano).
Probablemente ambas series fueron expuestas simultáneamente en las colecciones imperiales, enfrentando en parejas el verano con el fuego, el otoño con la tierra, el invierno con el agua y la primavera con el aire. 
RETRATOS COMPUESTOS
En sus “retratos compuestos” individuales va mucho más allá que en las series ya que a menudo Arcimboldo busca un parecido con el modelo retratado, como ya vimos en el cuadro de Rodolfo II caracterizado como el dios Vertumno o en su propio“Autorretratto Cartaceo” de 1587 que aunque aparenta ser un dibujo normal, si lo ampliamos podemos ver que esta formado únicamente por pequeños rollos de pergamino.
El Librero o el Bibliotecario de 1566
El Almirante
Sus retratos no pretendían ser satíricos ni caricaturas sino figuras simbólicas que representaban los cambios que produce la naturaleza y el paso del tiempo, y la relación entre todos los seres vivos y el hombre
Pero también existen cabezas creadas con intención satírica como la de “El Librero”, que resulta ser un cuadro completamente “moderno” casi increíble para datar del siglo XVI, en el que las formas prismáticas de los libros se han visto como antecedentes de los retratos “cubistas” de Picasso y Juan Gris (350 años antes del nacimiento de este estilo).  En este retrato se burla de los príncipes y nobles que acumulaban libros que nunca habían leído, y levantó las críticas de los bibliotecarios de la corte que se sintieron ofendidos, por su parecido con el bibliotecario Wolfgang Lazius.
La cara de su “Herodes” esta formada por niños desnudos muchos de ellos con la cabeza cortada, y en la de “El Jurista”, que parece ser un retrato satírico de Calvino, la cara la forman pollos desplumados algunos decapitados.
Herodes 1566. Cabeza con niños decapitados
El Jurista, retrato satírico de Calvino de 1566
Desde su último retiro en Milán envió a Rodolfo II en Praga el que sería su último autorretrato, un cuadro que representa las cuatro estaciones en una sola pintura. Así es como se veía Arcimboldo a sí mismo durante sus últimos años ya lejos de la corte. 

Autorretrato como las 4 estaciones 1590

AMBIGRAMAS: IMAGENES REVERSIBLES

Por último creó también unos cuadros que ahora se conocen como ambigramas o figuras reversibles, que aunque representan un bodegón en su vista normal, una vez dados la vuelta (girados 180º) aparece un feo rostro humano con gran sorpresa del espectador. Podemos imaginar el impacto de estas obras cuando eran mostradas por el emperador en el siglo XVI a los nobles que lo visitaban.


Los dos bodegones de Arcimboldo que mostrábamos en este mismo artículo son ambigramas o cuadros reversibles. El de la derecha se llama “Verduras en un tazón” oEl hortelano” de 1590 yel de la izquierda es otra "cabeza reversible con la cesta de fruta" del mismo año. Estas fueron las últimas obras que envió desde Milán a la corte de Rodolfo II en Praga.

 
















 
Aquí podemos el primer cuadro reversible que creó Arcimboldo en 1570 cuando se encontraba en Viena en la corte del emperador Maximiliano. Se llama "El cocinero (Il Cuoco) o el Plato de asado" y no está en ningún museo, pertenece a una colección particular de Suecia,  aunque ha sido prestado algunas veces para las exposiciones antológicas del artista

¿DONDE SE ENCUENTRAN LAS OBRAS DE ARCIMBOLDO?

Después de la muerte de Arcimboldo, la gran mayoría de sus obras permanecieron en Praga en la colección imperial. Rodolfo II continuó sus estudios de alquimia, mientras aumentaban sus continuas depresiones y sus temores por las profecías de sus astrólogos y magos. Entre 1604 y 1608 debido al estado caótico de su imperio y a la inminente guerra entre católicos y protestantes, su hermano Matías le arrebató muchos de sus territorios.  En 1609 los protestantes de Bohemia le obligaron a firmar la "Carta de Majestad", que les daba libertad religiosa y de conciencia.  En 1611 argumentando la perdida de su equilibrio mental, su hermano Matías le desposeyó del titulo de emperador y lo encerró en su propio castillo de Praga.

Rodolfo murió apenas un año más tarde el 22 de enero de 1612, un poco después que su viejo león, aunque Arcimboldo nunca conoció el triste destino de su protector porque había fallecido en Milán algunos años antes (1593).
Ahora se cree que su reinado fue un preludio y una posible causa de la guerra religiosa entre católicos y protestantes conocida como la "Guerra de los Treinta Años" (1618 a 1648), que arrasó los territorios que hoy constituyen Alemania. En 1648 durante esta guerra, el ejército sueco saqueó Praga y todas las colecciones imperiales y las pinturas de Arcimboldo fueron llevadas a Suecia como Botín de Guerra.
Los acuerdos de la Paz de Westfalia no hacían mención de las obras saqueadas, por lo que la mayoría de los cuadros más famosos de Arcimboldo incluyendo el cuadro reversible de El cocinero (Il Cuoco), El Jurista (El retrato satírico de Calvino), el Bibliotecario (un antecedente del cubismo) y el propio retrato de Rodolfo II como Vertumno con el que empezábamos este artículo, permanecen hoy en Suecia.


      La Primavera del Louvre
El resto de la obra de Arcimboldo que ha sobrevivido está distribuida por Europa y América en algunos museos, y en muchas colecciones privadas.  En Milán, la ciudad natal de Arcimboldo no hay ninguna obra importante del artista, y en Italia hay alguna en Florencia en la Galería de los Uffizi, en Cremona y en Brescia.   En el museo del Prado no encontramos ni un solo cuadro de Arcimboldo, ni tampoco en la Nacional Gallery de Londres, en los museos de Nueva York o en los de Roma. 

Las obras de Arcimboldo que no se encuentran en colecciones particulares están expuestas en varios museos de Suecia, en el museo del Louvre de París y en Viena, y también hay alguna obra del artista en museos de Norte América: en Connecticut y en Denver.    
La primavera de Giuseppe Arcimboldo. Real Academia 
de Bellas Artes de San Fernando (Madrid) 1563
En España tenemos un único cuadro de Arcimboldo pero de gran belleza, se trata de “La Primavera”, extraído de una serie gemela a la de las cuatro estaciones del Louvre, aunque no tiene la guirnalda bordeando la pintura, y la rosa que forma la barbilla es algo diferente.

Podemos ver esta pintura en uno de los museos más importantes de la ciudad de Madrid, quizá el segundo en importancia después del Prado, pero también uno de los menos conocidos y visitados: La Real Academia de Bellas Artes de San Fernando.

En Madrid, los cinco museos más visitados son: El Prado, El Reina Sofía, El Tyssen, El Palacio Real, y en quinto lugar: El museo de trofeos de fútbol del Real Madrid (visitado por 700 mil personas cada año).

EL PROGRAMA ARCIMBOLDER
Javier Román Cortés es un artista malagueño como Picasso, que además domina Photoshop y es uno de los más brillantes programadores en lenguaje CSS de nuestro país.  Es como un genio del renacimiento pero del siglo XXI.   Javier mantiene un Blog interesantísimo sobre programación, arte y diseño donde ofrece todos los programas que ha ido desarrollando en descarga gratuita para sus lectores y amigos.  
Para mi el programa más ingenioso y entretenido que ha creado es uno llamado ARCIMBOLDERSe trata de un programita muy pequeño y que casi no consume recursos del ordenador, que permite convertir cualquier fotografía en una pintura de Arcimboldo. 
Para ello utiliza estas pequeñas imágenes de frutas y verduras tomadas de los cuadros originales del pintor, con los que va “pintando” las distintas zonas de color de cada fotografía hasta crear una imagen perfectamente reconocible, formada únicamente por flores, verduras y frutos.
Estos son algunos de los experimentos que yo he realizado con el programa Arcimbolder. He utilizado mi cara como modelo y el resultado casi parece un plato de sopa juliana, pero también he procesado las imágenes de nuestra compañera Chari y de nuestra profesora Aida, ya que el efecto Arcimboldo queda mucho mejor en una cara femenina bonita.

Podéis experimentar con vuestras propias fotos, se pasa un rato muy divertido viendo como el programa “va pintando” con frutas y flores la imagen que estamos procesando. 
En la versión del programa actual (v2) hay dos tipos de brochas: Además de las frutas y flores de Arcimboldo que veíamos antes, también hay un juego de pinceladas de “estilo Van Gogh”.   Pero Javier Román promete ampliar el programa para admitir otro tipo de imágenes propias, así que pronto podremos incorporar como brocha para pintar retratos, todo tipo de iconos propios: Por ejemplo Letras, cuerpos desnudos, piedras o nubes.

Podéis descargar este estupendo programa gratuito desde esta dirección:

La descripción y el manejo del programa (en Inglés) aparecen en esta página del Weblog original de Javier Román Cortés:  

También se encuentra disponible la traducción de las instrucciones al Español. Hay que guardar este fichero de texto en el ordenador y posteriormente abrirlo con el “bloc de notas” o con “Word” para no tener problemas con los acentos: TRADUCCIÓN AL ESPAÑOL   

EL LEGADO DE ARCIMBOLDO

Dalí-Los exclavos-Retrato oculto de Voltaire

Dalí-El gran paranoico

La obra de Arcimboldo fue despreciada por extraña y grotesca durante casi 400 años, pero a principios del siglo XX fue redescubierta por los pintores modernistas y los surrealistas, y especialmente por Salvador Dalí que llamó a Arcimboldo el "padre del surrealismo”. Estos artistas quedaron fascinados con los juegos visuales y las alegorías de las  composiciones de Arcimboldo y se dieron cuenta que la historia del arte había pasado por alto la obra de un genio.   


Dalí-Mae West
Dalí se inspiró en la obra de Arcimboldo en muchas de sus pinturas como por ejemplo la “Cara paranoica” de 1935, y en el retrato oculto de Voltaire e incluso en la composición de la cara de Mae West, que puede verse materializada en el museo de Figueras.  También podemos ver referencias a Arcimboldo en las obras de otros muchos surrealistas como Paul Delvaux y René Magritte, e incluso en algunas obras de Pablo Picasso.
        
ARCIMBOLDO HOY  

El Caballero Boldo de "El valiente Desperaux" de Pixar

Boldo y Desperaux
Arcimboldo incluso ha llegado a ser un personaje de un cuento infantil en donde aparece representado como el caballero “Boldo” formado por frutas y piezas de cocina y con una pera como nariz. Se trata del libro “Las Aventuras de Despereaux”de la autora Kate di Camillo; un precioso cuento aunque algo complicado para niños pequeños, del que Pixar también ha hecho una película. 

Markus Raetz
Bernard Pras
La lista de los artistas contemporáneos en los que se ve claramente la influencia de Arcimboldo es interminable y podríamos escribir un artículo completo.

Algunos son grandes creadores que han sido influidos por la obra del genio de Milán, y otros han creado algunas obras propias “Al estilo de Arcimboldo” como un homenaje al pintor.

Pero no esta claro cuando una obra artística pasa de ser un homenaje, a tratarse de un plagio descarado, como por ejemplo podemos ver en algunas fotografías del artista mejicano Klaus Enrique. 

Octavio Ocampo
Bernard Pras
La influencia de Arcimboldo en los artistas actuales la podemos ver en muchísimos artistas, por ejemplo Oleg Shuplyak, los escultores Markus Raetz y Philipp Haas, el caricaturista Israelí nacido en Uruguay Hanoch Piven y el fotógrafo Bernard Pras considerado un Arcimboldo moderno que además de recrear algunas obras del pintor, ha hecho retratos compuestos de Einstein y de Marilyn con piezas sacadas de la basura.

También le deben gran parte de su inspiración el mexicano Octavio Ocampo, el italiano Sandro del Prete y el fotógrafo ya citado Klaus Enrique.
Oleg Shuplyak
Sandro del Prete

Flora por Klaus Enrique
Octavio Ocampo El Quijote
Hanoch Piven




Pero para mi uno de los mejores seguidores de Arcimboldo es un nuevo surrealista Francés con raíces españolas (nacido en Pau en la frontera entre ambos países) llamado Andre Martins de Barros, aquí podemos ver su versión del "librero".
 
Las creaciones de Arcimboldo siguen presentes en nuestros tiempos cada vez con mayor fuerza: Continuamente aparecen obras “inspiradas” en Arcimboldo en cada una de las artes del siglo XXI: tanto en pintura, como en fotografía, en el diseño y en el mundo de la Publicidad y de la Moda.   

Esta fotografía acaba de ser publicada para la actual campaña Primavera-Verano 2012 de Dolce-Gabanna y se llama “vestido de frutas”. Arcimboldo permanece entre nosotros 420 años después de su muerte.





1 comentario:

  1. Excelente todo! muy buenos los datos y merecido el reconocimiento al genio de Arcinboldi-

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